Por ser...

Podría decirse que soy una chica de un montón por descubrir

ya jugando en la treintena.

Arrastrando sueños desde los tiempos de aguinaldos

escribiendo, describiendo a familiares

a cambio de unas monedas convertidas en cromos.

Por ser...

Inversora en imaginación

obteniendo intereses en forma de relatos, obras de teatro,

guiones, poemas...idas y venidas.

Creyente de que siempre se puede hacer más, se puede ser más.

Por ser...

Podría decirse que si no existieran letras, frases, lápiz ni papel...

no sería ni una mínima parte de lo que quisiera ser...

Tendría que inventarse para no ser la mitad de lo que soy.

Por ser...

La eterna soñadora

como alguien me llamó “niña poeta”

desenterrando respuestas

del principio o final del arco iris

preguntándose porqué el amor

te enseña su más tierno rostro

para luego irse dándote la espalda,

la fría dorsal...

y a pesar de eso,

lo iza, lo alza, lo clama

pues sin él y todo lo que abarca

el estar aquí,

el simple hecho de vivir,

no conmovería.

...inspirando al mundo...

Por ser...

Por querer ser...

Y que los demás sean

o tengan la posibilidad de ser...

escribo y ofrezco lo que escribo

para que esas monedas

las trucadas a cromos

sean la risa, la sonrisa de una persona, dos o cientos

que naciendo afectadas por una enfermedad

tengan la oportunidad de mejorar,

de vivir sin dolor, sin respirar miedos.

Que siendo diagnosticadas con alguna dolencia,

tengan la ocasión de combatir,

de luchar contra el sufrimiento

sin que ello les pese más

de lo que ya pesa el estar enfermo.

Así que ya sabes

LEYENDO ESCRIBES LA HISTORIA DE UNA VIDA

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